Otra vez tuve que madrugar hoy para ir al hospital a ver al medico para que me de mis pastillas contra la paja. Sali a eso de las 4:30 a.m. Realmente Lima es otra de madrugada. Las calles estaban mas vacias que la audiencia de santa natura. Las pistas de igual forma. Ni una miserable combi o custer se asoman por varios, varios minutos que parecen una eternidad. Las luces de los postes de luz son los unicos vestigios de que la ciudad es habitada pero sus moradores se encuentran jateando merecidamente luego de un arduo dia de trabajo.
Apenas se pueden ver a unos cuantos tipos bien arropados vigilando los vecindarios, haciendo sonar su silbato de vez en cuando (hasta ahora no se para que mierda hacen eso) y alguno que otro sujeto, no se si borrachos o no, que deanvulan por una ciudad inmersa en la oscuridad de la noche. Ademas estan los panaderos, que desde temprano ya andan alistando la mercancia para mas tarde.
Luego de chapar mi custer y enrumbarme al hospital, me puse a escuchar musica para no jatear como lo hace la mayoria de gente que a esa hora viaja quien sabe a donde. Lo malo es que como la noche anterior estaba que terminaba unas exposiciones y me habia quedado hasta cerca de la medianoche, me agarro un matasueño que llegue jato con las justas al lugar.
Ya luego de hacer cola y despues de mosquearme durante varias horas (imaginense estar parado desde las 5 de la mañana hasta las 8 a.m.) por fin me atendieron rapidamente y mi tratamiento contra la manopla parece seguir buen curso. Claro que los doctores deben estar horrorizados (traumados) por el caso que estan tratando, pero supongo que en la universidad los deben haber preparado bien para tratar a tipos tan enfermos y dementes como yoni.
Asi que por ahora ando bien con la terapia aunque debo reconocer que recien hoy he sentido unas leves ganas de darme una corridita pero he podido controlarlo, supongo yo que con la medicacion de los doc más que por voluntad propia.
jueves, 22 de febrero de 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
2 comentarios:
bien ahi pajero, esos doctores deben estar traumadazos, pero asi es pe, mejor ni les digas tu nombre, no vaya a ser que te usen como ejemplo en sus clases, jaaaaaaa
Animos Pajero, no te rindas .... te dejo una pastilla para el alma:
"A los verdaderos hombres se les conocen no cuando les va bien y nunca se les cae, sino cuando se les cae y logran que se les levante"
Publicar un comentario