Ayer en la noche me paso algo realmente interesante. Me fui a jatear temprano porque los lunes siempre son fregados para mi ya que si no me despierto temprano, no chapo la combi pa' la uni. Pero una vez desparramado en el catre, se me paso el sueño y me puse a hacer esas tipicas preguntas filosoficas que uno se hace cuando no tiene nada que hacer como por ejemplo: de que forma estoy llevando mi vida, que objetivos persigo y que es lo que hago para conseguirlos.
Luego de pasar cerca de dos horas pensando en esa vaina, llegue a la conclusion que lo unico que yo busco en la vida (al menos por ahora, luego quien sabe), como todo hombre egoista y superficial (osea, como todo peruano), es tener mujeres fuertotas a su lado y un monton de plata que malgastar. Luego me empece a preguntar por que diablos sigo viviendo de la forma en que vivo (siendo un jeropa compulsivo, sin una hembra aunque sea feita nomas y sin tener un centavo en el lompa).
Y sin darme cuenta, me empece a envalentonar, empece a cuestionar todos esos estupidos prejuicios que durante toda la vida he tenido y que no me han permitido tener lo que siempre he querido tener. En ese momento, senti como si un manto de osadia me hubiese cubierto. Senti que podia enfrentarme, como los grandes heroes de la antiguedad, a cualquier sujeto y despellejarlo en el acto.
Definitivamente pense que me habia picado un moscon (o un abejorro tal vez) y que me habia avivado y sacado del retraido letargo de cobardia y pusilanimidad en que estaba viviendo. Estaba hecho una fiera, un monstruo en computacion que podia vencer a cualquiera de esos que se creen los muy vivos pero que en el fondo no son mas que una tira de amanerados. Es decir, de un momento a otro me habia convertido de un miserable cobarde a un machazo nervudo capaz de gritarle su vida a cualquiera con tal de conseguir lo que quiere.
Sin embargo, al levantarme hoy por la mañana y salir a la calle como todos los dias, me senti el mismo de siempre. El mismo jeropa aburridon, cansado de su vida como un cocho de mas de 70 años, sin animo para nada y con una apatia capaz de irradiarlar a su entorno con su sola presencia. Toda la energia, el vigor y la valentia se habian ido por el water al momento de cagar en la mañana. Solo quedaban los rezagos del mismo cometero empedernido de siempre.
Asi fue, en la casa me la di de recontra machito pero en la calle, puras naranjas. Como todo tipico peruano cobardon y amilanado, no pude llevar a la practica esa emocion y exaltacion de sed de revancha que tuve una noche de la mas extraña pero que durante la vigilia se esfumo como humo en el aire.
lunes, 2 de abril de 2007
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2 comentarios:
animo pajero!!! ya llegara todo llega, pero socializa mas pe pajero, asi ya encontraras una hembra fuertota y no solo una feita
Al final busca una que te quiera pajero, te lo digo por experiencia
Fácil la eyaculaste sin querer, mientras jateabas. Adios tío, que buen blog carajo, hace falta hacer llorar al cíclope muy seguido para escribir así de bien.
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